LA VERDADERA FELICIDAD.
(Cooperacion especial de Jane)
La felicidad tal como la concebimos usualmente, es solo un destello pasajero que ilumina nuestra vida, es una emoción indescriptible
que así como llega, se va, en un abrir y cerrar de ojos, en un
instante. La experimentamos, cuando conseguimos algo que
deseamos, o cuando nos ganamos un premio, cuando nos dan
una gran noticia, o cuando algo nos conmueve y nos quita
la respiración por unos segundos… pero es tal su intensidad,
que rápidamente se diluye y desaparece, dejándonos un
gran vacío y muchas veces una decepción.
Pero la verdadera felicidad no consiste en vivir un momento
especial, tampoco es una meta o una sorpresa, la verdadera
felicidad es lo que sentimos como consecuencia de una
forma de ver y vivir la vida, es un estado de conciencia. Ella
nos inspira a tener buena voluntad, a ir por la vida llenos
de serenidad, equilibrio y armonía, con una pequeña
sonrisa dibujada en el rostro.
La verdadera felicidad es una sensación interior de libertad,
de tranquilidad, seguridad y satisfacción. La sentimos cuando
salimos a la vida con ganas de hacer las cosas bien, de dar,
de mejorar, de alcanzar las metas que nos hemos propuesto,
de crear, de trascender.
El secreto de las personas felices es que tienen esa maquinita
mágica que les permite sumar y multiplicar, en lugar de
restar o dividir, es una especie de convertidor de lo
aparentemente negativo en positivo, de lo oscuro a lo claro,
de lo amargo a lo dulce, de lo triste a lo alegre, de lo
imposible a lo posible.
Los personas le quitan importancia a Ser, por el deseo de
poseer, y en el camino para lograrlo, van perdiendo la
felicidad. La ambición exagerada, los lleva a desear lo que
no tienen y a desvalorizar lo que ya tienen,
ganando con esto penas y preocupaciones sin razón.
Aprendamos a transitar por la vida ligeros de equipaje, y con
unos lentes que suavicen el paisaje del diario vivir, dejemos
a un lado la costumbre de ver y resaltar el lado oscuro de
cada situación, busquemos siempre el aspecto positivo de cada experiencia. Ser optimistas, nos permitirá reconocer los
elementos negativos de una situación sin que estos nos
paralicen, con la confianza de que podremos enfrentarlos,
resolverlos y superarlos.
Es más fácil recorrer la vida con una actitud positiva y
confiada, ayudados por la linterna del optimismo, el
entusiasmo y la esperanza, que vivir en la oscuridad
de la ignorancia, temiéndole a todo lo que
imaginamos que nos puede pasar de forma pesimista
y negativa.
Ray Bueno
"Todos tenemos la capacidad de ser felices".
Autor: Adam J. Jackson
(Cooperacion especial de Jane)
La felicidad tal como la concebimos usualmente, es solo un destello pasajero que ilumina nuestra vida, es una emoción indescriptible
que así como llega, se va, en un abrir y cerrar de ojos, en un
instante. La experimentamos, cuando conseguimos algo que
deseamos, o cuando nos ganamos un premio, cuando nos dan
una gran noticia, o cuando algo nos conmueve y nos quita
la respiración por unos segundos… pero es tal su intensidad,
que rápidamente se diluye y desaparece, dejándonos un
gran vacío y muchas veces una decepción.
Pero la verdadera felicidad no consiste en vivir un momento
especial, tampoco es una meta o una sorpresa, la verdadera
felicidad es lo que sentimos como consecuencia de una
forma de ver y vivir la vida, es un estado de conciencia. Ella
nos inspira a tener buena voluntad, a ir por la vida llenos
de serenidad, equilibrio y armonía, con una pequeña
sonrisa dibujada en el rostro.
La verdadera felicidad es una sensación interior de libertad,
de tranquilidad, seguridad y satisfacción. La sentimos cuando
salimos a la vida con ganas de hacer las cosas bien, de dar,
de mejorar, de alcanzar las metas que nos hemos propuesto,
de crear, de trascender.
El secreto de las personas felices es que tienen esa maquinita
mágica que les permite sumar y multiplicar, en lugar de
restar o dividir, es una especie de convertidor de lo
aparentemente negativo en positivo, de lo oscuro a lo claro,
de lo amargo a lo dulce, de lo triste a lo alegre, de lo
imposible a lo posible.
Los personas le quitan importancia a Ser, por el deseo de
poseer, y en el camino para lograrlo, van perdiendo la
felicidad. La ambición exagerada, los lleva a desear lo que
no tienen y a desvalorizar lo que ya tienen,
ganando con esto penas y preocupaciones sin razón.
Aprendamos a transitar por la vida ligeros de equipaje, y con
unos lentes que suavicen el paisaje del diario vivir, dejemos
a un lado la costumbre de ver y resaltar el lado oscuro de
cada situación, busquemos siempre el aspecto positivo de cada experiencia. Ser optimistas, nos permitirá reconocer los
elementos negativos de una situación sin que estos nos
paralicen, con la confianza de que podremos enfrentarlos,
resolverlos y superarlos.
Es más fácil recorrer la vida con una actitud positiva y
confiada, ayudados por la linterna del optimismo, el
entusiasmo y la esperanza, que vivir en la oscuridad
de la ignorancia, temiéndole a todo lo que
imaginamos que nos puede pasar de forma pesimista
y negativa.
Ray Bueno
"Todos tenemos la capacidad de ser felices".
Autor: Adam J. Jackson
No hay comentarios:
Publicar un comentario