23 de febrero de 2008

ESTUDIO CIENTIFICO DE LA CONCIENCIA...

ESTUDIO CIENTIFICO DE LA CONCIENCIA.......

El ser humano es lo que es, al menos en su diferenciación con
el resto de los seres vivos, porque es consciente. Pero, ¿qué
entendemos cuando decimos que el ser humano es consciente?.

Hemos estudiado el cerebro, hemos intentado comprender cómo
pueden surgir de una maraña de células interconectadas entre sí
las imágenes mentales que vemos cuando contemplamos un
paisaje o cuando lo rememoramos, los conceptos que nos permiten
clasificar los componentes del mundo, los significados de las
palabras que usamos para nombrarlos; pero continúa siendo un
misterio, que hoy empezamos a poder abordar científicamente,
cómo de un órgano físico compuesto de células y de impulsos
eléctricos pueden emerger imágenes, pensamientos, recuerdos y
sentimientos tan complejos como el amor, los celos o la nostalgia.

Básicamente la conciencia es todo esto y sus consecuencias.
Pensemos por ejemplo en la acepción de conciencia moral, del
remordimiento o de la culpa. Esta posibilidad exclusiva de los
humanos depende de una inteligencia compleja, de la capacidad
de prever el futuro y de la capacidad de ponernos en el lugar de
otra persona. Gracias a la conciencia tenemos la idea de lo que
es una persona, y por ella podemos compadecernos de nuestros
semejantes, comprendernos y comunicarnos. Para todo esto es
preciso una mente consciente.

Fundamentalmente la conciencia es la experiencia fenoménica
que tenemos del mundo. Es la diferencia entre estar despierto o
estar dormido (y sin soñar).Esta experiencia fenoménica es la
percepción particular e intencionada que hacemos de lo que nos
rodea. Los filósofos han empleado diversas expresiones para
referirse a esta experiencia fenoménica, nos hablan de los datos
sensoriales, de los qualia para referirse e nuestras sensaciones
subjetivas de color o de dolor, de calor o de frío, de temor o de
alegría. Eso que sentimos al tener contacto con la realidad. Son
la cualidades de las cosas en función de que alguien las perciba.
Pensemos en el color, en realidad el color es algo que depende
no sólo del objeto sino de un sujeto que perciba un determinado
objeto de la realidad.

Naturalmente estos datos sensoriales son algo que en gran medida
imponemos a nuestra percepción en función de una determinada
segmentación de los datos que llegan al cerebro y en función de
nuestra intención. Por eso una de las características de la conciencia
es su intencionalidad. La conciencia siempre es conciencia de algo,
apunta a algo, se refiere o nos remite a algo.

La experiencia fenoménica es entonces principalmente un intento por
dar sentido al mayor número de datos que recibimos de la realidad
atendiendo a nuestra utilidad. Naturalmente en este esfuerzo
interviene algo que alimenta a la conciencia que es un sistema de
creencias socialmente adquirido. Necesitamos saber lo que nos
conviene y lo que no, y nuestra vida fundamentalmente consiste en
ir adquiriendo opiniones sobre las cosas. Por eso la conciencia tiene
un papel causal en nuestra conducta. Nos comportamos en función
de lo que creemos y para eso saber que se sabe, es decir, ser
conscientes resulta fundamental. Resumiendo, entonces, a lo que
llamamos conciencia es:

* Una propiedad o un proceso que emerge de nuestro cerebro

* Que interpreta la realidad en función del sujeto

A esto es a lo que hemos denominado experiencia fenoménica, que es:

* Intencional: Refiere siempre a alguna otra cosa

* Semántica: Aporta un significado simbólico que permite relacionar
el dato sensorial con los objetos del mundo.

* Privada: La experiencia consciente es siempre de cada cual, no
podemos sentir lo que siente el otro

* Incorregible: En consecuencia no podemos corregir a nadie sobre
lo que siente o piensa:

* Indubitable: Se manifiesta con tal claridad que no dudamos de los
que percibimos o sentimos, lo que no significa que sea verdadero o nos equivoquemos respecto del mundo. Solamente no nos equivocamos
sobre lo que percibimos.

Sin embargo hoy por hoy esta concepción ha cambiado y hoy resulta
ser uno de los problemas fundamentales que tiene planteada la ciencia.
Se ha comprendido que cualquier ciencia que pretenda estudiar al ser
humano, especialmente la psicología, debe abordar este fenómeno si
quiere ser una ciencia que sirva a los hombres para su mejor comprensión.

Ray Bueno
Miami, Fla. USA