28 de enero de 2008

CUIDADO: CON LA OBESIDAD INFANTIL


Cuidado con la obesidad infantil

Los niños con problemas de sobrepeso no son de por sí niños sanos.
Un niño gordo tiene problemas para relacionarse con su entorno social,
puede perpetuar esta situación en la edad adulta, trayendo así graves
problemas de salud como el exceso de colesterol en la sangre y
deficiencias en los sistemas respiratorio y circulatorio.

Para evitar estas situaciones es necesario que los padres dejen de asociar
como iguales la idea de un niño sano con la de un niño gordo. También
deben darle a sus hijos una alimentación balanceada, sin excesos en
grasas animales. El control del tiempo que se dedica a la televisión
debe propiciar otras formas de esparcimiento como los juegos
que exigen esfuerzos físicos.

Usted como padre debe de tener el control con el refigerador,
su hijo/a no puede tener luz verde para comer lo que se quiera
dentro del refigerador, los padres son los que tienen la
responsabilidad de controlar dicha situacion; para que sus
hijos crezcan saludables.

Tambien, los juegos en la TV le quitan la oportunidad de
consumir energia, no los deje por mucho tiempo.
A muy temprana edad enséñele la importancia
de estar saludable, para que cuando
ellos esten adultos tenga
una vida
feliz

Ray Bueno
Miami, Fla. USA

CONSEJOS: NUTRICIONAL PARA JOVENES


Nutrición para jóvenes

Los adolescentes de uno y otro sexo pasan por un periodo
de crecimiento rápido
que lleva al máximo sus
necesidades de nutrientes. Los varones crecen
10 centímetros como máximo al año y las mujeres
un poco menos. En consecuencia las demanda de
alimentos es grande, aunque proporcional al peso corporal.

Es la segunda etapa de gran crecimiento físico en el
hombre, después de los tres primeros meses de vida.

La alimentación en un adolescente es por lo general
irregular en tiempos, cantidad y calidad. Los
refrigerios constituyen parte significativa de su comidas
totales. Tales refrigerios consisten principalmente
en comidas y bebidas muy ricas en fosfatos, sodio
y carbohidratos simples (azúcares)

En parte estos refrigerios son un intento de saciar su
voraz apetito. Además, compartir los alimentos con
sus amigos y hacer a un lado las reglas de los
adultos son parte de la manera de alimentarse
que tienen los adolescentes. Tales hábitos dan
origen a dietas poco balanceadas y elevan el riesgo de
caries dental. En esta época se adquiere fácilmente
el hábito de consumir muchas calorías y pocos nutrientes.

A pesar de la legislación de carácter preventivo, en
este grupo de edad puede presentarse la ingestión de
bebidas alcohólicas. Cuando esto ocurre
de manera excesiva y continua, casi siempre se
presentan problemas dentro
de la familia y esta situación puede agravarse con
las presiones sociales y de los amigos.

La carencia de nutrientes más común en la adolescencia
es la de hierro. Contra la opinión generalizada, la falta
de hierro en la sangre o anemia se presenta tanto en
uno como en otro sexo, aunque esta deficiencia predomina
en las mujeres adolescentes. Los intentos de adelgazar y
tener una figura más o menos esbelta son poco frecuentes
en los varones adolescentes, que en general están
dedicados a incrementar su talla y su constitución física.

En las mujeres adolescentes sucede lo contrario.
Aunque la tendencia es que estas presiones por la figura
se presenten a menor edad, por fortuna se observan
con mayor frecuencia entre las niñas de 16 a 18 años.
Esta obsesión por el peso y la apariencia reduce
el consumo de nutrientes como los minerales
de zinc, cobre y manganeso, entre otros.

Ray Bueno
Miami, Fla. USA