El jengibre, usado desde hace mucho como remedio para el dolor de estómago,  ayuda a aliviar uno de los más temidos efectos del tratamiento del cáncer: las  náuseas provocadas por la quimioterapia, según el primer estudio importante sobre  esa planta.
   Las personas que empezaron a tomar pastillas de jengibre varios días antes de  una dosis de quimioterapia tuvieron menos náuseas, y fue menos severa, que los  que recibieron un placebo, según el estudio, que fue financiado por el gobierno  federal.
   "Quedamos encantados'' al ver lo beneficioso que es'', comentó Julie Ryan,  directora del estudio, realizado en la Universidad de Rochester en Nueva York.     
                  La Sociedad de Oncología Clínica de Estados Unidos publicó los resultados ayer  y se presentarán en la reunión anual del grupo en este mes.
   Pero no se apresure a buscar un ginger ale. Muchos refrescos y galletas de  jengibre no contienen la sustancia pura, sólo el sabor, explicó Ryan. El estudio  probó con un extracto de raíz de jengibre de calidad farmacéutica y no se sabe si  es posible conseguir los mismos beneficios con el te de jengibre o el jengibre en  polvo que se vende como especia.
   Sin embargo, las cápsulas de jengibre pudieran ofrecer una forma simple y  barata de aliviar las náuseas, que es mucho más que un simple problema de calidad  de vida, comentaron los médicos. Algunos pacientes de cáncer interrumpen el  tratamiento de quimioterapia, o simplemente lo rechazan debido a las náuseas, lo  que afecta las probabilidades de vencer la enfermedad.
   Hay medicamentos que controlan las náuseas, pero casi tres cuartas partes de  los pacientes de quimioterapia no consiguen eliminarlas, declaró Ryan.
   "Los pacientes preguntan constantemente qué otra cosa pueden hacer'', afirmó  el doctor Richard Schilsky, oncólogo de la Universidad de Chicago y presidente de  la sociedad.
   Desde hace tiempo el jengibre se ha recomendado para los problemas  estomacales, pero los estudios no han mostrado resultados definitivos.
   El nuevo estudio utilizó una cápsula especialmente formulada que contenía  extracto de raíz de jengibre concentrado y purificado, preparado por Aphios  Corp., de Woburn, Massachusetts.
   En el estudio participaron 644 pacientes de todo el país que habían sufrido de  náuseas en tratamientos de quimioterapia. Dos terceras partes padecían de cáncer  de seno y el resto de otras formas del mal. Fueron separados en cuatro grupos y  se les administró una de tres dosis de jengibre (el equivalente de medio, uno o  un gramo y medio de jengibre diario) o un placebo, además de los medicamentos que  se usan tradicionalmente contra las náuseas.
   Los pacientes tomaron las cápsulas durante seis días, empezando tres días  antes del inicio del tratamiento de quimioterapia. Clasificaron la severidad de  las náuseas en una escala siete puntos en el primer día de cada uno de los tres  tratamientos.
   Todas las dosis de jengibre redujeron significativamente las náuseas y las  dosis media y baja rindieron los mejores resultados. Los pacientes que tomaron  jengibre clasificaron el nivel de severidad un promedio de dos o más puntos menos  en la escala, una mejora de alrededor de 40 por ciento en comparación con los  tratamientos de quimioterapia sin jengibre, explicó Ryan. Los que recibieron el  placebo no reportaron diferencias.
   El tiempo puede haber sido clave para el éxito: un estudio anterior encontró  que el jengibre no tenía efecto cuando los pacientes esperaban al día del  tratamiento para empezar a tomarlo. En el nuevo estudio los investigadores  querían determinar si resultaba positivo comenzar a tomarlo antes.
   "Fue una forma diferente de tratar la náusea, de tratar de evitarla'', afirmó  Ryan.
   El jengibre no provocó efectos secundarios en el estudio pero los médicos  indicaron que los pacientes deben consultar con sus médicos porque puede afectar  la coagulación de la sangre, especialmente durante el tratamiento contra el  cáncer o si se toma junto con Coumadin, un anticoagulante, u otras medicinas de  uso frecuente. También es peligroso para las personas que se vayan a operar,  advirtió la American Cancer Society.
   El Instituto Nacional del Cáncer financió el estudio y los investigadores no  tenían ninguna relación con Aphios, el fabricante del extracto. La compañía vende  un tipo diferente de cápsula de jengibre como suplemento dietético pero espera  recibir autorización de la Dirección de Alimentos y Medicamentos (FDA) para  vender la nueva fórmula de jengibre para combatir las náuseas, señaló su director  general Trevor Castor.
   Como suplemento dietético, 50 o 100 cápsulas de jengibre se venden por entre  $6 y $30.
   "No podemos decir específicamente si funcionaría cualquier otra forma además  de la de nuestro estudio'', añadió.
   A pesar de todo, es alentador saber que el jengibre ofrece esperanza como una  forma barata y fácil de aliviar los efectos de la quimioterapia en los pacientes,  declaró el doctor Durado Brooks, de la American Cancer Society.
   "Es difícil ver sufrir a alguien. Así que cualquier cosa que podamos hacer  para aliviar los síntomas de la quimioterapia son muy bien recibidos'', afirmó.
Ray Bueno
Miami, Fla. USA